miércoles, 30 de agosto de 2017

Encuesta a mujeres

Encuesta a mujeres confirma que “ellos no son todos iguales”. (No se trataba de hombres, sino de orgasmos)


El 78% de las mujeres afirmaron que no todos los orgasmos son iguales y que hay algunos mucho mejores que otros.


Aunque la mayoría de hombres creen saber lo que les gusta a las mujeres, nunca está de más documentarse un poco y saber qué es lo que ha descubierto la ciencia al respecto. OMGYes, una página web que explica a las mujeres cómo tener mejores orgasmos, financió una investigación al respecto.
¿Es mejor jugar con los dedos de forma rápida o lenta? ¿con más presión o con menos? ¿directamente sobre el clítoris o en la piel de alrededor?, todas esas preguntas que hombres y mujeres se han hecho alguna vez para satisfacer a sus parejas, han sido respondidas en un estudio publicado recientemente en la revista especializada Journal of Sex and Marital Therapy. Tras una charla con un grupo de amigos y amigas en la que se dieron cuenta de que a no todas las mujeres les gusta lo mismo, Lydia Daniller (estudiante de literatura) y Rob Perkins (estudiante de medicina) decidieron tomarse en serio el asunto y averiguar qué evidente misterio estaba teniendo lugar.
Primero analizaron investigaciones científicas. Fue así como se dieron cuenta de que no había ningún tipo de estudio sobre el placer femenino. Sí había sobre la biología del orgasmo o sobre la anatomía del clítoris, pero el placer era algo que nadie había tratado hasta ahora.
Debby Herbenyck, la catedrática de la Universidad de Indiana que dirigió el estudio de OMGYes, explica que en Norteamérica todavía hay un tabú sobre todo lo que esté relacionado con el placer femenino. "En EEUU el gobierno tiende a financiar aquellas investigaciones que versan sobre enfermedades, disfunciones o prevención del embarazo, pero nada que tenga que ver con el placer sexual que la mayoría de personas experimentamos a lo largo de nuestras vidas", explica en declaraciones recogidas por Quo.
Tras un brainstorming de ideas para marcar los objetivos del estudio, los investigadores publicaron en el sitio de anuncios Craiglist un cuestionario sobre las preferencias sexuales femeninas que fue contestado por 1.055 mujeres. El equipo de investigación también realizó 1.000 entrevistas personales a través de medios multimedia a varias mujeres que explicaron lo que más les gustaba en la cama.
En cuanto a las preferencias de caricias genitales, se clasificaron en cuatro grupos: presión, forma del movimiento, patrones realizados y ubicación del tacto. Aunque había gran diversidad en lo que le gustaba a cada mujer, si se detectaron tendencias generales. Las mujeres preferían una presión leve a la mediana, ya fuese en el clítoris o en la zona circundante. En cuanto a los movimientos, los ascendentes y descendentes, así como los que iban de lado a lado eran los favoritos.
Por otro lado, el 36,6% de las mujeres reconocieron necesitar la estimulación del clítoris para llegar al orgasmo durante la penetración, aunque para el 18,4% la penetración por sí sola era suficiente para llegar al clímax. Aproximadamente, el 70% de las mujeres reconocieron preferir la estimulación directa del clítoris y el 5% prefería que su pareja no le tocase esa zona. El 78% de las mujeres afirmaron que no todos los orgasmos son iguales y que hay algunos mucho mejores que otros.
Montevideo Portal

martes, 14 de febrero de 2017

Comer granos integrales o enteros podría evitar que engordes

Comer granos integrales o enteros podría evitar que engordes

Un estudio encontró que empezar a consumir alimentos con más fibra reduce la absorción de las calorías y mejora la tasa metabólica.



Los granos integrales parecen reducir la cantidad de calorías que absorbe el cuerpo durante la digestión y acelerar el metabolismo, explicó el autor del estudio, J. Philip Karl, científico de la nutrición que realizó la investigación cuando era un estudiante de doctorado en nutrición en la Universidad de Tufts, en Boston, según consigna HealthDay.
Aunque otros estudios han encontrado que las personas que comen granos integrales son más delgadas y tienen menos grasa corporal que las que no, Karl afirmó que ha sido difícil separar los efectos de los granos integrales del ejercicio regular y una dieta más saludable en general.
Así que, para el nuevo estudio, "controlamos estrictamente la dieta. No les dejamos que perdieran peso", dijo.
Los investigadores lo lograron al localizar las necesidades calóricas específicas de cada uno de los 81 hombres y mujeres del estudio, de 40 a 65 años de edad.

Durante las primeras dos semanas del estudio, todos comieron el mismo tipo de alimento y los investigadores computaron las necesidades calóricas individuales para mantener su peso. Luego, asignaron aleatoriamente a las personas a comer una dieta con granos integrales o con granos refinados.
Se dijo a los hombres y las mujeres que comieran solamente la comida proporcionada y que siguieran con su actividad habitual.
Los que siguieron la dieta de granos integrales absorbieron menos calorías y produjeron más heces. Su tasa metabólica en reposo (las calorías quemadas cuando descansaban) también fue mayor. Se cree que el contenido de fibra de los alimentos con granos integrales, aproximadamente el doble que el de los alimentos con granos refinados, juega un papel importante en esos resultados, dijo Karl.
"El déficit de energía en los que comieron los granos integrales, en comparación con los que comieron granos refinados, sería equivalente a las calorías que alguien quemaría si tuviera que andar aproximadamente una milla (1.6 km) en aproximadamente 20 o 30 minutos", dijo. Pero el estudio no demostró que los granos integrales provocaran la pérdida de peso.
"No sabemos si a largo plazo esto se traduciría en una pérdida de peso", dijo Karl, aunque su equipo sospecha que sí. "Esto se traduciría en unas 5 libras (2,2 kg) al año", estimó Karl.
El estudio es sólido, apuntó Connie Diekman, directora de nutrición universitaria en la Universidad de Washington en St. Louis luego de ser consultada.
"Da una buena evidencia de que el consumo de granos integrales es una parte importante en un plan de alimentación saludable", señaló Diekman. El estudio documenta cómo contribuyen los granos integrales al sentimiento de saciedad y parecen aumentar el metabolismo, añadió.
"El estudio duró poco y fue algo limitado en cuanto a la diversidad de la población, pero el resultado es una recomendación positiva sobre la alimentación de la que cualquiera se podría beneficiar", señaló.
online de la revista American Journal of Clinical Nutrition.
En una investigación relacionada en la misma edición de la revista, el mismo grupo de investigadores encontró que las personas que comían granos integrales experimentaron mejoras modestas en el entorno intestinal y en ciertas respuestas inmunitarias. La ingesta de granos integrales también se ha asociado con un riesgo más bajo de enfermedad cardiaca, diabetes tipo 2 y algunos cánceres, indicaron los investigadores.
Al comprar granos integrales hay que fijarse en la etiqueta si son "100 por ciento granos integrales", indicó Karl. "Solo porque algo se haga con granos integrales no significa que contenga muchos", explicó. "Observe y vea si el primer ingrediente es un grano integral, y un 100 por ciento" completó.