miércoles, 12 de octubre de 2011

Abel Inchuste: ¿Un Ministerio de Deportes?

A CIEN AÑOS DE LA C.N.de E.F.,…….. ¿UN MINISTERIO DE DEPORTES?



Es de conocimiento público el propósito del gobierno uruguayo de crear un Ministerio de Deportes. Con esta medida se daría por finalizada la actual situación de dependencia del deporte del Ministerio de Turismo. Independientemente de la valoración que merezca la obligada relación institucional de estos aspectos tan diferenciados en la vida social, consideramos pertinente y acertada esta iniciativa. Con este motivo vamos a dedicar nuestra atención a un hecho de innegable importancia profesional y de máxima actualidad.

La organización deportiva a nivel de estado siempre conlleva  enfrentar un complejo problema, que a nivel internacional los países han resuelto de maneras diversas. Naturalmente las respectivas idiosincrasias y condiciones sociopolíticas e históricas han condicionado y diversificado tales estructuras organizativas.

Nuestro país ha mostrado una preocupación temprana por este tema, como queda demostrado en 1911 con la creación de la Comisión Nacional de Educación Física. Tenemos por tanto una experiencia valiosa que nos sirve de antecedentes.

En el año 2005 junto a una numerosa y calificada participación de colegas y deportistas frentamplistas, sumamos nuestra modesta pero entusiasta colaboración en la elaboración de un documento para la UNIDAD DEPORTES de la COMISIÓN INTEGRADA DE PROGRAMAS DEL FA-EP-NM. Al considerar que los contenidos de aquel documento son de interés y que sustancialmente permanecen vigentes, transcribiré sus contenidos  más relevantes.

En su introducción el documento deja constancia que: “El FA-EP debe desarrollar una política en el área de la cultura física acorde con sus principios básicos tendientes a favorecer a los sectores más desprotegidos de la sociedad, a la vez que dotar al sistema de eficiencia para el mejor cumplimiento de sus objetivos progresistas.”

Se destacan las iniciativas en el ámbito de la enseñanza, de la actividad comunitaria y del deporte de competencia. Los principios generales que deberán guiar la acción serán los siguientes:

Una cultura física democratizadora  -  una cultura física descentralizadora  -  una cultura física de promoción comunitaria  -  una cultura física jerarquizadora  -  una cultura física integradora  - y una cultura física higiénica y rehabilitadora.

“Para el desarrollo práctico de estas ideas será necesario que el estado asuma un papel de dirección de los diferentes procesos que se dan en el área. Su participación hará que los esfuerzos se dirijan a los objetivos y no se diluyan entre múltiples acciones improvisadas, dispersas y descoordinadas, cuando no, contrapuestas. El estado orientará, regulará y en función de sus políticas, condicionará apoyos y ayudas.”

“En relación a la cultura física el estado debe cumplir con su responsabilidad a través de un organismo rector y orientador de carácter nacional, así como por medio de los gobiernos departamentales y los diferentes consejos de la ANEP.”


Al finalizar, el documento recomendaba unas primeras medidas de gobierno
 
Cobertura progresiva de la educación física en el sistema educativo, desde el preescolar hasta el universitario, analizando en profundidad planes y programas.

Convocatoria a un congreso nacional de deportes, instancia nacional de amplia participación en la definición de estrategias.

Elaboración y aprobación de una ley de deporte que ordene y regule todo lo  concerniente a la legislación específica.

Política de apoyo discriminado al deporte federado, especialmente a través de apoyo técnico a las federaciones. Plan de exoneraciones diferenciadas a clubes deportivos.

Promoción del deporte comunitario, a través del fortalecimiento de las políticas locales con fuerte presencia municipal, elaborando estrategias de desarrollo de marcado contenido social que incluya el cuidado de la salud.

Elaboración de un plan nacional de inversión deportiva que implica la finalización del censo de infraestructuras para lograr una inversión planificada y  sustentable.

Reestructura de la formación de recursos humanos, analizando en profundidad las necesidades del país a fin de satisfacer las demandas. Asimismo, efectivizar el pasaje del ISEF a la Universidad, definiendo el rol de los profesionales de educación física y del deporte, procediendo a regular las distintas áreas profesionales.

Política de apoyo al deporte infantil. Se hará prevalecer los aspectos formativos del niño y del joven, tendiendo a que dicha iniciación se manifieste libremente.

A mi entender, el Frente Amplio, en el gobierno durante estos últimos siete años, ha navegado por aguas poco profundas             en el terreno social y en un área propicia como el deporte, debería arriesgar más.

A cien años de la creación de la Comisión Nacional de Educación Física, un Ministerio de Deportes implicaría retomar el rumbo correcto perdido durante demasiados años.



                                                                       Abel Inchuste